Memorias de un Excombatiente
Pronto, por fin la novela de Hortera… va un avance… Un día quise conocer la verdadera historia de un investigador privado. Me había colmado de historias policiacas, tan anglosajonas que no podía imaginarme la cara de un mexicano en medio de una investigación policiaca. En el directorio telefónico busqué “investigadores privados” y encontré un nombre que me pareció genial. Ramón Hortera. En principio batallé para marcar el número. ¿Qué demonios le diría? –oiga, quiero conocerlo, porque se me hace increíble que usted exista en este planeta- pero lo que me condujo a él fue una propuesta mejor. Le pediría una entrevista para un diario en el que yo no trabajaba, pero un buen amigo sí. Ernesto Santana. Le propuse realizar una entrevista con un gendarme estilizado, un policía de boina calada, un elemental y extraño investigador privado que me develara los métodos de la extorsión a punta de chicharra y mandoble fino. Pulsé los números del teléfono. Al otro lado de la línea me contestó u